Los proyectos inmobiliarios constan de muchas etapas y pueden verse afectados por cientos de razones por las que los promotores carecen de liquidez, como la falta de financiación e inversión, las crisis financieras y la morosidad de los clientes.

Los préstamos a promotores están destinados a empresarios y constructores que necesitan financiación para iniciar o finalizar la construcción de un inmueble o una promoción inmobiliaria.

Los préstamos a los promotores les permiten mantener el proyecto en marcha y no arriesgar su propio capital de inversión, el capital de posibles socios o los fondos listos de posibles clientes que hayan mostrado interés en el proyecto.

Un préstamo promotor, es un producto financiero que las entidades bancarias, ofrecen a las empresas que desean poner en marcha una promoción inmobiliaria, de manera que puedan contar con la financiación suficiente para realizar el proyecto.

Con anterioridad a la crisis financiera sufrida en la última década, los requisitos para la concesión de préstamos, para la promoción inmobiliaria, eran muy flexibles. Prácticamente bastaba con tener un proyecto económicamente viable. La viabilidad comercial estaba asegurada prácticamente, dado que se vendía todo lo que se ponía en circulación, anteriormente a la mencionada crisis.

Además, las entidades bancarias no sólo apoyaban económicamente la construcción del proyecto, sino que también concedían préstamos puente para: Poder adquirir el suelo, Solicitar la licencia de obra, Y realizar los trámites previos a la construcción de los inmuebles.

El hecho de que los bancos hayan endurecido sustancialmente las condiciones para solicitar el préstamo promotor actualmente, y que además no financien los primeros pasos del proyecto (adquisición del suelo, licencias de obra, etc…), supone una importante dificultad para los promotores pequeños y medianos, que desean volver a la actividad y no cuentan con grandes fondos propios. O no pueden involucrarse en más de un proyecto, de forma simultánea.

Hasta hace unos años, especialmente cuando el sector de la construcción impulsaba el crecimiento del PIB, los promotores solían poder financiar casi siempre el inicio o la finalización de un proyecto inmobiliario con un préstamo bancario.

Sin embargo, la situación ha cambiado y los bancos son ahora muy cautelosos a la hora de financiar proyectos inmobiliarios, no sólo cuando el rendimiento de la inversión es insuficiente o la rentabilidad está en duda.

Sin embargo, si los bancos son ahora reacios a financiar nuestras promociones, podemos conseguir préstamos para promotores a través de fondos de capital privado para obtener la financiación que necesitamos para nuestras promociones.

HPM Financial Services, pone a su disposición:

Soluciones financieras exclusivas, para poder solventar: La adquisición del suelo, licencias de obra, cualquier tipo de trámite previo a la construcción. Además de ofrecer las mejores condiciones finales del mercado actual, para el préstamo promotor, que financia el resto del proyecto de construcción, porcentajes de financiación y las mejores condiciones del mercado.

Financiación de la promoción inmobiliaria

La financiación para el inicio, desarrollo y finalización de un proyecto de promoción inmobiliaria incluye la compra de terrenos para su desarrollo, la planificación urbanística previa a la construcción y, por supuesto, la construcción del propio edificio.

Nuestra financiación puede aplicarse en las siguientes fases:

1. Financiación de la compra de terrenos y del inicio de la promoción inmobiliaria

En este caso, financiamos hasta el 40% del precio de compra del terreno que se va a desarrollar, así como parte de los costes de la planificación preliminar y de la obtención del permiso de construcción (siempre que el promotor obtenga la mayoría de los fondos necesarios con sus propios recursos).

2. Préstamos y financiación para la preparación de terrenos y solares en la promoción inmobiliaria

Para reestructurar adecuadamente la propiedad, se necesitan fondos para toda la topografía, la preparación del terreno, la construcción y la mejora de las carreteras, los accesos y las líneas de servicio (agua, electricidad, etc.)

Una parte de este préstamo también puede utilizarse para cubrir el primer préstamo para la adquisición de terrenos

3. Financiación alternativa para los promotores para la construcción

Los préstamos para los promotores están destinados a financiar la construcción de un proyecto residencial. En el caso, de que no se obtenga toda la financiación necesaria para la ejecución integra del proyecto de construcción residencial, por parte del circuito bancario tradicional. Tenemos la opción de recurrir a financiación alternativa, en la que entran en juego prestamistas de capital privado o fondos de inversión. En HPM FINANCIAL SERVICES podemos ofrecer posibilidades de financiación alternativa en caso de ser necesario, asumiendo que los costes por parte del solicitante pueden ser mayores que los habituales en banca.

4. Préstamos para la finalización y entrega de la promoción

A menudo, los promotores no pueden completar sus proyectos y transferir los activos inmobiliarios a sus clientes debido a la insuficiencia de la financiación (normalmente el 80-90% del coste de construcción) cuando el proyecto está a punto de completarse. Por esta razón, es habitual que se solicite financiación adicional a la inicial, para finalizar la promoción inmobiliaria. En HPM FINANCIAL SERVICES, estamos especializados en resolver este tipo de situaciones.

5. Financiación de proyectos inmobiliarios y edificios

La principal ventaja de la financiación de proyectos inmobiliarios a través de los bancos es que trabajan en función de la realidad del proyecto y los tipos de interés se ajustan al mercado. Sin embargo, no suelen ser tan flexibles si las comparamos con la financiación alternativa o privada.

Por otro lado, los bancos tienen que controlar y supervisar la construcción del proyecto y no aceptarán las solicitudes del préstamo si el solicitante ya está muy endeudado o si la construcción de la promoción inmobiliaria no cuenta con las garantías exigidas por el banco.